Seleccionando a tus Amigos

Si piensas que puedes vivir solo y hacer todo lo que quieras o desees, sin necesidad de nadie. Estás equivocad@.

A veces nuestra soberbia y/o quizá ignorancia, nos lleva a creer que somos diferentes a los demás, y peor aún; que somos superiores o distintos.

Nuestros pensamientos, nuestra escritura, nuestras obras, y nuestra palabra tienen “poder”, es una frecuencia energética vibratoria que da forma a determinadas cosas y situaciones en nuestra vida.

Por ejemplo todo aquello que siempre deseé con intensidad y fuerza, me ha sido concedido. “Donde está tu pensamiento, allí estás tu”.
Para bien o para mal, todo viene si es que en un momento determinado, así lo has pedido u “ordenado”. Con serenidad, humildad y nobleza; o con soberbia, ira o rabia.

“Más que gente alrededor, necesitas personas con las cuales estar conectado/a. La conexión es más importante, que la simple compañía de personas, con las cuales quizá nunca te permitan progresar, ser feliz o estar en armonía.”

Hay personas que dicen ser “tus amigos/as”. Y derrochas energía y tiempo en ellas, pero notas que por alguna razón, estás te agotan, te cansan y llegas a sentir incluso hasta un cierto rechazo por ellas. La verdad es que este recelo o rechazo, lo sentirás desde tus primeros encuentros con ellas. Pero ciertas personas practican el arte de la manipulación, y te envuelven con falsas promesas y palabras, logran convencerte en cierta medida, en acerca de cosas que no terminas nunca de verlas claras. Y vuelves a darles otra absurda oportunidad. Ellos son manipuladores, y nosotros necios de seguirles la corriente en temas inciertos.

“Estar rodeado/a de gente, no basta”. Selecciona y dedica mayor o menor tiempo según la afinidad que tengas con ellos. Hay que buscar la conexión afín a nuestra forma de vida. Tienes que conectar con aquella gente con la cual sientas que estás evolucionando hacia tus objetivos y metas. ¿Cómo se consigue esa Conexión? Sintonizando en aquellos que son los aspectos realmente importantes para ti, como la visión de la vida, de lo espiritual, de la naturaleza, de todo aquello que en verdad vale la pena, el aprecio y respeto por el prójimo. La convivencia en armonía, el amor. El apoyo para nuestra evolución mutua, como seres latentes, y pensantes. Todo esto no es fácil. Pero tampoco imposible.

Desacuerdos, contradicciones, malos entendidos y quizás discusiones habrá siempre, pero la conexión está más allá de eso. Lo percibirás en lo más profundo de tu ser. Y se hará cierto en el corazón. Resulta ser una simpatía innata. ¿Puedes amar a la gente sin que haya conexión? Esto es posible, como por ejemplo; puedes Amar a tu familia pero en muchos casos no te sentirás conectado/a con todos sus miembros. La conexión hay que sentirla y debe ser recíproca. Sino, no lo es. La conexión se verifica de dos en dos. Uno con varios pero, jamás uno solo. Hay conexión de Dios con uno y viceversa. Pero con los seres humanos, siempre será de más de uno.”

DIFERENTES TIPOS DE AMIGOS

· Aquel que solo te llama cuando te necesita. Es egoísta, pero acude a ti porque confía en que podrás resolver su o sus problemas.
· Aquel que llama con frecuencia aunque sea solo para saber como estás, para contarte un chiste; o ambas cosas.
· Aquel que siempre que le llamas, te coge el teléfono. Te responde con alegría, e incluso te agradece el haberte acordado de él.
· Aquel al que casi nunca encuentras por teléfono, no responde a tus mensajes, no contesta tus emails. Y cada cierto tiempo te contacta por propia voluntad para darte mil excusas, y agregando que te aprecia mucho. Se compromete contigo para comer o cenar sin que nadie se lo pida y vuelve a desaparecer sin cumplir su “Invitación”. O cuando mucho, te llamará a última hora para volver a esgrimir otra absurda excusa, y te volverá a plantar. ESTE NO ES AMIGO..
· Hay amigos que aún estando muy lejos, y llenos de compromisos profesionales y familiares, de vez en cuando piensan en ti con amor y respeto. Y eso, aunque no lo digan, lo percibimos. Mejor aún si nos llaman o nos escriben manifestando sus profundos recuerdos y sentimientos. Estos son buenos amigos, y ambos sabemos que ahí estamos para lo que sea.
· Y los supuestos amigos que desaparecen toda vez que les necesitas o te encuentras pasando algún mal bache. Nunca fueron tus amigos, ni lo serán. Del mismo modo, aquellos que solo aparecen y no se despegan de ti, cuando las cosas te van muy bien. Hay que ser prudente, y consecuente.

Hasta la próxima “AMIG@S..
Raúl Gutiérrez
20 Agosto de 2007